Yerba Buena: fracasó la sesión por el Código Urbano, y su tratamiento es incierto

Solamente cinco ediles de los 10 estuvieron presente en el recinto del Concejo Deliberante.


Fracasó el intento de debatir el nuevo Código de Ordenamiento Urbano (COU) de Yerba Buena, y se enrarece el clima entre oficialistas y opositores en el Concejo Deliberante. Sólo cinco de los 10 concejales se hicieron presentes ayer en el recinto, y la sesión cayó por falta de quórum. Los ediles que responder al intendente Pablo Macchiarola opinaron que los ausentes no aparecieron por mezquindades políticas. Quienes no fueron, en tanto, dijeron que se precipitó el tratamiento y que una ordenanza de esta talla amerita tener asistencia perfecta (hay ediles de licencia o por salir), por lo que es incierto cuándo se pueda llegar a discutir el tema.

El presidente del Concejo, Javier Jantus, dio por caída la sesión por falta de quórum luego de 30 minutos de espera, en medio del fastidio de desarrolladores inmobiliarios presentes en el público. En sus bancas estaban Agustina Simón Padrós (vicepresidenta primera), Gabriela Garolera (vice segunda), Mauricio Argiró y Franco Marigliano, además de Jantus. Ausentes, en tanto, estuvieron Mercedes Moraiz, Rafael Olea, Walter “Kabuby” Aráoz, Álvaro Apud y María Decoud Griet (con licencia).

Tras el intento fallido, Jantus no ocultó su frustración. “Sabíamos que podía suceder, porque el no ir es una herramienta política legislativa que cada uno puede usar. Por supuesto que la tiene que usar con responsabilidad”, dijo a LA GACETA.

Pedido de sanciones

Marigliano, presidente de la comisión de Obras Públicas, dijo a este diario que tenía “tristeza y bronca” dado que no llegó ni a discutirse el proyecto que demandó más de dos años de trabajo. “Nos hubiera gustado debatir con los cinco concejales que no vinieron, si tienen una idea alternativa. Los concejales hablan por sus dictámenes, y el nuestro tiene 238 páginas”, chicaneó.

El edil no ocultó su fastidio por lo ocurrido. “Debería haber una sanción. Debería revisarse cómo cinco personas pueden impedir el trabajo de otras cinco. No es una jornada feliz, pero vamos a seguir intentando”, expresó. Además, consideró que es “muy urgente” sancionar un nuevo COU dado que hay proyectos de inversores que necesitan certezas para poder ejecutarse. “La verdad es que hay una falta de respeto, están jugando con los intereses de mucha gente”, dijo.

“Unos traidores”

Simón Padrós, en tanto, remarcó que es un trabajo grande que encabezó la arquitecta Isabel Salas y que se escuchó a todos Respecto a las ausencias, la vicepresidenta fue muy clara: “es una lástima que no den quórum. Esa es la forma de trabajar: venir, dar quórum y cada uno vota lo que cada uno quiera. Es necesario que dejen las mezquindades políticas de lado y que realmente piensen en el ciudadano.

Argiró, por su parte, coincidió con que el debate del nuevo COU fue “amplio y abierto”, y resaltó que va a preservar la idiosincrasia de Yerba Buena, respetando el verde y sin grandes torres.

A su vez, Argiró fue duro con la postura de la oposición. “Han tenido a disposición el proyecto desde junio. Están de vacaciones y no vienen a trabajar”, disparó. Y continuó: “es gente que no quiere trabajar, es gente que se colgó del saco de Pablo Macchiarola y de Roberto Sánchez para llegar a las bancas y que no responden al mandato que le dio el vecino que es, por ejemplo, venir a trabajar. A los concejales que han llegado por la oposición, puedo entenderlo. Pero los que han llegado de la mano de Juntos por el Cambio, la verdad, son unos traidores”, arremetió.

Entre los ausentes, Apud consideró que “es una locura” pretender tratar “la ordenanza más importante de los últimos 30 años” sin una concejal que tenía pedida la licencia hace tiempo. Respecto a la iniciativa, insistió con que se marcaron muchas falencias, errores y ambigüedades. “Tiene muchos errores. Es una locura aprobarlo como está y luego seguir modificando, como dicen ellos. Prefiero tener paciencia. Los 10 concejales sabemos de la necesidad de un nuevo Código Urbano. No es que no queremos dar quórum. Si estábamos los 10 íbamos a poner las objeciones o hacer un dictamen. No comprendo la torpeza y la mezquindad política con la que actúan”, lanzó.

“Ciudad de cemento”

El concejal jaldista “Kabuby” Aráoz consideró que el COU es un hecho político, no técnico, dado que son los funcionarios los que deciden qué ciudad se quiere o cómo se la plantea. “Al ser un hecho trascendental, considero que tienen que estar los 10 concejales presentes. Decoud Griet solicitó licencia con anterioridad. Tengo entendido que Argiró se irá 20 días por cuestiones institucionales”, dijo. Además, el justicialista denunció que es un código que se hizo “a puerta cerrada”. “Han hecho un código presionados por el sector empresarial, que gana plata con el suelo de Yerba Buena en detrimento de mi ciudad. Se ha convertido en una ciudad de cemento”, cuestionó.

Moraiz, concejal por CREO, también argumentó su desacuerdo con querer sesionar sin la totalidad de sus pares. “Falta el 10% para una de las ordenanzas más importantes de esta gestión y de los últimos años. Me parece de un oportunismo político que no corresponde acompañar y, de ninguna manera, voy a dar quórum a ese atropello”, dijo. Mencionó que pidió tiempo para terminar un dictamen en minoría. “Este código, así como está, tiene muchas discrecionalidades al Poder Ejecutivo, que va a terminar generando excepciones o midiendo a cada uno según la vara que le convenga”, reprochó.

Intento por sesionar: convocarían para mañana o el lunes

Jantus dijo que analizan convocar a una nueva sesión mañana o el lunes. Anticipó, de todos modos, que el edil Argiró también tiene un viaje programado la semana próxima, por lo que tampoco estaría la totalidad de los ediles. Consultado por este diario, explicó que el reglamento prevé sanciones para quienes no asistan a tres reuniones, y que en la Ley de Municipios, incluso, prevé medias coercitivas. “Me parecería bochornoso”, dijo, y afirmó que apostará por el diálogo. /LaGaceta